Totalmente de acuerdo con que la calidad de la electrónica de Samsung es bastante justita, al menos en estas OLEDs. La S95B fué un desastre en cuanto a fallos de pantalla (amén de la cantidad de paneles que llegaban doblados), y aunque este año han mejorado bastante, personalmente tampoco estoy del todo tranquilo, porque mi S90C también me ha hecho un par de cosas raras que me han obligado a desenchufar la TV del todo para que la imagen saliera correctamente. Jamás me ha pasado nada parecido con ninguna de mis otras 2 TVs. La Samung HU8500 del 2014 es la antítesis de estas QD-OLED, es un tanque ultra-premium en calidad de construcción, pero ya por entonces me costó un 50% más cara que la S90C, y eso que han pasado 10 años de inflación.
Por otro lado a la velocidad que avanzan las novedades, ya no es como antes que te compras una TV para 10 años. Ahora en 3-4 años habrá salido el Pholed, el QDEL, las pelis se masterizarán a 4K nits y en 2030 tendremos 10K nits y el Micro-Led. Vamos que en mi opinión no merece la pena pagar literalmente el triple por la A95L de Sony sólo por tener una TV mejor construída, porque la tecnología del panel se va a quedar obsoleta en poco tiempo. Ya nadie se acuerda de esas maravillosas OLEDs de Panasonic de hace 3 años, cuando 900 y pico nits eran la repanocha, y que encima costaban un pastizal. Por eso prefiero comprar una TV más barata de Samsung y cambiarla una vez agotada la garantía. A cambio el riesgo de que, aun estando en garantía, te falle el panel y sufrir un trastorno desagradable lidiando con el SAT.
En fin: las Samsung hay que comprarlas en oferta, con un buen descuento sobre las marcas más premium, para que merezcan la pena.